Hoy retomamos la sección sobre esos casos dignos de estudio de los llamados regeneradores de la democracia. A las puertas del Parlamento de Andalucía, hacen su papel… jugar a oposición sin escaños.
En la batalla de declaraciones y opiniones sobre el Decreto antidesahucios tampoco se quedaron atrás los de la formación magenta. A grandes rasgos decían que no servía para nada, que era una medida propagandística e, interrogados por el supuesto recurso al Constitucional, no se mojaron… aunque cuando llegó el recurso interpuesto por el PP bien que se dejaron las palmas de las manos entre tanto aplauso. Ahí, también, jugaron su papel… y, usando el chascarrillo, podríamos decir que ejercieron de palmeros del Partido Popular.
Entre todos los magentas andaluces hay uno que es digno de señalar en este tema, se trata de Francisco José González Alcón (miembro del Consejo Territorial de Andalucía de UPyD y responsable de Estudios y Programa). Para los amigos, Paco, y para los tuiteros @Paco_Glez_.
Todo lo tacha de propaganda, de «pantomima bolivariana inútil»… o de gasto superfluo. En un principio, antes que los aplausos al recurso le perturbaran, criticó el Decreto antidesahucios porque iba a suponer la contratación de 3000 nuevos empleados públicos.
Ante tal dispendio de argumentos y datos, se le pregunta de dónde saca la cifra… y, ni corto ni perezoso, dice que de ningún lado… que es una exageración para ilustrar las necesidades del decreto. A la izquierda se puede ver esa corta conversación de tuits.
Peculiar forma de regenerar la democracia esa de inventarse datos para exagerar. Pero aquí no queda la cosa… uno, que es insistente, pide argumentos y explicaciones ante las acusaciones.
Debería ser lo mínimo, no ya para regenerar la democracia sino para tener una discusión un poco seria. Pero no, para Paco González no… él lo explica claro: «no me da la gana de concretar más».
Aunque parece que él si tiene claro las reglas del debate: nada de chascarrillos fáciles sin base argumental. Él quiere argumentos para debatir.
¿Y si le pides argumentos? Pues eso: exagera, se los inventa o no le da la gana de concretar… que para eso él es un regenerador de la política y tú, tú eres un vividor de los partidos viejos. ¡A callar!
Los aplausos al recurso se les han metido tan adentro de la conciencia que ya hasta interiorizan los argumentos del Partido Popular negando los desahucios… «Los desahucios se están paralizando en toda España con menos bombo y platillo», dice el amigo Paco. Y es cierto, se paran muchos desahucios pero sin la intervención de ningún gobierno, a excepción del andaluz que decidió implicarse y romper la baraja a favor del más débil. Los que paran desahucios son los que ellos mismos han calificado como PAHtasunos.
Paco insiste, «propaganda barata e inútil». Hay que llegar a la raíz del problema… que pasa por una «normativa estatal» (ya sabemos que a UPyD esto de las comunidades autónomas les da un poco de alergia) y ¡ojo! la verdadera solución al problema de los desahucios no es otra que… ¡redoble de tambor! … reformar la ley electoral. Así, tal cual… y se queda tan pancho.
Cierto es que una normativa estatal sería genial, que los murcianos tienen los mismos derechos a no ser desahuciados que los andaluces… pero ante la inacción del gobierno central, ¿una comunidad no puede hacer nada? UPyD prefiere cruzarse de brazos y que las autonomías no legislen en derechos fundamentales.
¿Propaganda? Cierto es que se ha vendido la medida -qué menos- y ha traspasado las fronteras de nuestro país y es que no es «cotidiano» que un gobierno se ponga del lado del desahuciado y se enfrente a la banca. Ha sido una chispa que ha saltado y ha llamado la atención: sí se puede. Es posible legislar para frenar los desahucios. Y ya son otros gobiernos los que, exprimiendo sus competencias, hacen frente al drama… por ejemplo el caso de Richmond, una ciudad mediana del estado de California.
¿Inútil? Que se lo digan a las 18 familias que se beneficiaron del decreto y a los casi 200 casos que se quedaron a las puertas por el recurso y que todas las noches escuchan los aplausos de UPyD y a Alicia Martínez (PP-A) decir que Rajoy ha acabado con los desahucios.
Pues nada, que sigan aplaudiendo.