El que se comprometiera a ser respetuoso con todas las sensibilidades políticas, el que hablara de comprensión, consideración… empieza a quitarse la máscara y dejar claro quién es realmente. Lo vimos el sábado pasado, en el acto de investidura como alcalde, mientras prometía el cargo de capitular la concejala de Izquierda Unida, Josefa Medrano. Y es que hasta en tres ocasiones tuvo que decir su texto ante las constantes interrupciones de la bancada popular y parte del público asistente invitado por el PP, una clara muestra de falta de respeto. Así comenzaba Medrano: «Como ciudadana partidaria de un estado republicano, federal, laico y solidario…»

Tal y como recoge El Correo en su edición del día 12-6-11 esta forma de actuar por parte del nuevo gobierno y sus invitados es «impropia para el contexto», y añade que la situación «se pasó por completo de rosca entonces abucheando, gritando e incluso insultando con gruesas palabras a la edil.» Al protavoz electo del grupo municipal de IU en el Ayuntamiento, Antonio Rodrigo Torrijos, le hicieron lo propio mientras pronunciaba su discurso. En fin, así son los señores y señoras del Partido Popular.

El Sr. Zoido, abanderado del talante, ahora también del talento, según el mismo ha dicho, y el respeto ha prometido hasta la saciedad que gobernará para todos los sevillanos, sin exclusión, bonitas palabras que por otro lado son imposibles de cumplir y ya se le plantea el primer dilema: Derogación o no del Plan Centro.

En su programa electoral, esa carta interminable a los Reyes Magos -que parece que fue escrita por Buzz Lightyear, por aquello de que llega hasta el infinito y más allá- deja claro que una de las primeras medidas a tomar por el alcalde será la derogación inmediata del «Plan de Ordenación del Casco Histórico para la protección de la Zona Monumental», para esto cuenta con el apoyo de parte de los comerciantes.

Hasta aquí todo claro, ahora viene el problema: el colectivo del taxi, por un lado, y la asociación de peatones de Sevilla, asambleas ciclistas, el foro de vida independiente, entidades ecologistas y la asociación para la prevención de accidentes de tráfico, por otro, solicitan que se mantenga el Plan Centro.

¿Y ahora qué?

El dilema tiene dos soluciones claras, mantener el citado Plan o derogarlo, tome la que tome, estará faltando a su palabra al no gobernar para todos los ciudadanos ya que la opinión sobre el tema está dividida al 50% . Y es que no se puede prometer todo, no se puede regalar el oído a la ciudadanía. Por mucho que lo repita no se puede gobernar para todos porque nos encontramos intereses enfrentados en nuestra ciudad. Así que el Sr. Zoido nos ha mentido e incumplido su promesa antes incluso de tomar una decisión, eso si es un record.

Nuestra posición es clara, no engañamos a nadie, estamos a favor de la regulación del tráfico en el centro de la ciudad por nuestra coherencia ideológica. Ya el nuevo alcalde empieza a desenmascarse y dejar claro que el que decía no ser de izquierdas ni de derechas es de la derecha más rancia y extrema de Sevilla.